“Tal vez debamos pensar en dónde es apropiado usar dispositivos digitales, y tal vez también sea hora de empezar a pensar en lugares donde ciertos dispositivos digitales no deberían usarse”, del mismo modo que hemos prohibido fumar en ciertas áreas, dijo.
Otro elemento clave es garantizar que los niños y adolescentes, sin importar su origen, origen étnico o condición social, estén “alfabetizados, equipados y empoderados”, añadió. Esto significa equiparlos con el conocimiento adecuado, “para que gobiernen el mundo digital y no permitan que el mundo digital los gobierne a ellos”.
A estudio de la OMS Un estudio publicado el mes pasado descubrió que los comportamientos problemáticos y “adictivos” en materia de juegos y redes sociales están aumentando entre los adolescentes en Europa.
El informe, que encuestó a casi 280.000 personas de entre 11 y 15 años en Europa, Asia Central y Canadá, encontró que más de uno de cada 10 lucha por controlar el uso de las redes sociales y experimenta consecuencias negativas. Las niñas reportaron niveles más altos que los niños, con un 13 por ciento en comparación con un 9 por ciento.
El estudio también encontró que el 12 por ciento de los adolescentes corren el riesgo de tener juegos problemáticos, y que los niños tienen más del doble de probabilidades que las niñas de mostrar signos de juegos problemáticos.
“Como con cualquier otra cosa, puedes utilizar estas herramientas bien y eficazmente”, dijo Azzopardi Muscat. “Pero tenemos que tener cuidado, porque tenemos una parte de la población que informa un uso problemático, y sabemos que esto eventualmente puede afectar sus resultados educativos, su salud mental y bienestar, y su productividad en la fuerza laboral”.
